Puede que te estés preguntando qué es, pero seguro que si tienes perro ya habrás oído hablar de ello. El Canicross básicamente es un deporte que consiste en correr con un perro atado a la cintura a través de una línea de tiro que va hasta el arnés del perro. Es una disciplina que lleva introducida en España desde hace varios años y ya existen un buen nutrido grupo de pruebas y campeonatos: estatales, autonómicos y populares.
La combinación hombre-perro hace especialmente atractiva esta práctica deportiva. Ya que te permite disfrutar de la naturaleza en compañía de tu fiel amigo y compartir con él una afición común, la pasión por correr. Y decimos naturaleza porqué habitualmente se realiza en la montaña o zonas rurales, ya que el asfalto es muy agresivo para las almohadillas de nuestros peludos amigos. Las carreras son muy similares a las carreras de montaña aunque a una distancia menor (de 5 a 10 km habitualmente) y tienen menores desniveles.
En el Canicross tienen cabida todo tipo de perros, siempre que no tengan ningún impedimento para su práctica, aunque es recomendable realizarlo con perros de entre 20 y 35 kg, puesto que de esta manera podremos aprovechar realmente las ventajas de correr tirado por el perro. Otro factor importante a tener en cuenta es la edad del animal. Para realizar esta práctica la única limitación que se establece por seguridad del animal es que sea un animal sano con más de 1 año y menos de 10.
Para participar en una prueba de Canicross, se requiere que el perro tenga un año cumplido, esté al corriente de las vacunaciones y pase reconocimiento veterinario previo a todas las pruebas. Estas recomendaciones son muy importantes para no llegar a hacer daño a nuestro compañero forzándole. Recordemos que el perro no puede decir cómo se encuentra si no que somos nosotros, con nuestro sentido común y observación de su lenguaje corporal, los que interpretaremos si está cansado o le duele una almohadilla. El perro es un animal tan fiel que en ocasiones puede llegar a extremos físicos que les pueden perjudicar seriamente por el simple hecho de seguir corriendo junto a su amo.
Especial precaución debemos tener con la temperatura. Los efectos del calor, y en el caso del perro cuando hablamos de calor son más de 20º, pueden llegar a ser fatales. Por lo tanto, debemos evitar a toda costa correr con más de 20º para evitar problemas mayores. De hecho, las competiciones no se realizan a partir de esta temperatura. Suelen realizarse en invierno, primavera y otoño.
El material necesario para practicar esta modalidad deportiva consiste en un arnés especial de tiro para el perro (no es válido el arnés de paseo), una línea de tiro con amortiguador, un mosquetón de seguridad (por si tenemos que soltar al perro en décimas de segundo) y un cinturón de Canicross que debe ser ancho para proteger la espalda del corredor de los tirones del perro. También te recomendamos el uso de guantes para evitar hacernos daño en las manos a la hora de una inesperada caída. Todo este material lo puedes adquirir en tiendas especializadas y es fácil encontrarlo buscando en Internet.
Para empezar a acostumbrarnos a este nuevo ejercicio es conveniente hacerlo de forma progresiva, al principio con sesiones cortas (de unos minutos hasta llegar a la media hora). Esto será suficiente para no cansarse demasiado y acostumbrar al perro a su nueva disciplina. Debemos repetir estas sesiones unas 4 veces por semana. Es fundamental que enseñemos a nuestro perro a ir delante. Muchos perros lo hacen de forma natural, por deseo de correr y explorar, pero otros necesitan aprenderlo a base de motivación.
Si ya corres habitualmente con tu perro suelto, simplemente es cuestión de unirse y probar. Lo normal es que salga bien al cabo de unos días de entrenamiento y el perro haya entendido su nuevo papel de trabajo en equipo. Sin duda, una buena manera de compartir experiencias con tu mejor amigo.
¿Te atreves a probar esta nueva modalidad?